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demidov escribió: ↑28 Abr 2024, 17:44 Yo estoy encantada de haber llevado a arreglar los vaqueros que tenía rotos por el roce de los muslos. He alargado un poco más su vida. Ojalá lo hubiera hecho antes con otros que me deshice de ellos en su momento. Compré un par para reponerlos, por lo que ahora tengo más vaqueros para ir rotando y así no les doy tanto tute.

Llevo una temporada poco compradora. Creo que este mes salvo un par de productos faciales que necesitaba reponer no he comprado nada. Me he dado cuenta que mi ritmo de consumo se ve afectado por mi estado de ánimo. Cuando estoy mejor y más animada, salgo más y en general estoy más predispuesta a comprar. Por el contrario, cuando no estoy en mi mejor momento, ya no salgo tanto y lo que menos me apetece es comprar.

Pinkdemia escribió: ↑28 Abr 2024, 18:24 A mí me pasa al revés pero de otra manera. Cuando estoy bien no tengo ansia por nada, todo me parece suficiente. Cuando estoy mal no hago más que intentar poner solución y una de las maneras que se me ocurren es comprar cosas que en ese momento siento que necesito. Por lo menos ya voy a tiro fijo a por cosas que sé que voy a usar, pero no me parece la terapia más acertada

Antípodas escribió: ↑01 May 2024, 17:00

Pinkdemia escribió: ↑28 Abr 2024, 18:24 A mí me pasa al revés pero de otra manera. Cuando estoy bien no tengo ansia por nada, todo me parece suficiente. Cuando estoy mal no hago más que intentar poner solución y una de las maneras que se me ocurren es comprar cosas que en ese momento siento que necesito. Por lo menos ya voy a tiro fijo a por cosas que sé que voy a usar, pero no me parece la terapia más acertada

Me pasa parecido, cuando peor he estado ha coincidido con las rachas de compras compulsivas más bestiales… y sé que no es arreglo, pero me muevo constantemente entre el “no necesito nada más” y el “para esto trabajo”